Por Luis Fernando Chero – Estudiante de Economía del VII ciclo A lo largo de casi los 200 años de independencia del Perú, el país ha experimentado una serie de cambios en su forma de gobierno que nos ha llevado a adoptar una constitucionalmente y jurídicamente ordenada. Desde las tomas de poder por militares y […]
Por Dirección de Comunicación. 12 mayo, 2021.
Por Luis Fernando Chero – Estudiante de Economía del VII ciclo
A lo largo de casi los 200 años de independencia del Perú, el país ha experimentado una serie de cambios en su forma de gobierno que nos ha llevado a adoptar una constitucionalmente y jurídicamente ordenada. Desde las tomas de poder por militares y los referéndums interpuestos, hasta las marchas de 2020 y los gobiernos constitucionales de transición, el Perú ha demostrado que la voz del pueblo es la voz de Dios.
No es pues, sin la acción soberana de su gente, que el Perú se ha formado políticamente y ha tomado su rumbo hacía el Bicentenario. Es por ello indispensable que la ciudadanía naciente con mayoría de edad y las nuevas generaciones que vendrán, tengan claro que la participación ciudadana es la verdadera base de la democracia, y que, por ende, es la base de nuestra nación mestiza.
Sin las diferentes realidades y puntos de vista, el Perú seguiría sesgado en un centralismo que es ajeno a lo que el Perú realmente es en conjunto y unidad. De ahí la importancia de la búsqueda de nuevos líderes que forjen un camino sólido y amplio de comunicación. La creación de puentes entre los peruanos es la clave para un desarrollo más igualitario y equitativo para todos.
Mientras más jóvenes nos interesemos en coyuntura política, y entre más conscientes de nuestra realidad como peruanos estemos, más factible será la formación de una base sólida para el cambio. Así, desde nuestra posición, podemos empezar a crear conciencia: hablándole a nuestro entorno sobre la importancia de un voto informado, de no caer en actos de “mini” corrupción, de tener mayor responsabilidad social y ambiental, recordemos que el éxito de nuestro país es el resultado de la suma de voluntades de todos los peruanos.
Como jóvenes, debemos ser conscientes que, para asumir cargos en la sociedad y especialmente públicos, debemos estar preparados en conocimientos y valores. Soy un fiel creyente de la capacidad que tiene el Estado de mejorar la vida, no de uno ni dos, sino de millones de personas. Por ello, el llamado a todo hacedor de políticas publicas es el de la búsqueda de la excelencia, porque sus decisiones tendrán un gran impacto en la calidad de vida de cada uno de nuestros compatriotas.
Finalmente, recordar que todos podemos ser líderes y hacedores del cambio, solo basta tener la convicción que lo haremos por amor a nuestra patria.
Este es un artículo de opinión. Las ideas y opiniones expresadas aquí son de responsabilidad del autor.
